Ecografía cerebral a bebés Antofagasta

Hay varios factores que pueden hacer que un recién nacido necesite una ecografía cerebral, entre los cuales se encuentran:

• Nacimiento prematuro: Los bebés nacidos antes de las 37 semanas de gestación tienen un mayor riesgo de sufrir complicaciones cerebrales, como hemorragias intracraneales o leucomalacia periventricular. La ecografía cerebral puede ser útil para identificar y monitorear estas condiciones en recién nacidos prematuros.
• Trauma durante el parto: Si un bebé experimenta trauma durante el parto, como asfixia perinatal, compresión del cordón umbilical o uso de instrumentos como fórceps, puede ser necesario realizar una ecografía cerebral para evaluar posibles lesiones cerebrales.
• Infecciones congénitas y perinatales: Las infecciones que ocurren durante el embarazo o alrededor del momento del parto, como la rubéola, el citomegalovirus, la toxoplasmosis, la sífilis o la infección por el virus del herpes simple, pueden afectar el cerebro del recién nacido. La ecografía cerebral puede ayudar a detectar anomalías cerebrales relacionadas con estas infecciones.
• Convulsiones neonatales: Si un recién nacido experimenta convulsiones, la ecografía cerebral puede ser útil para identificar la causa subyacente, como una hemorragia, una malformación cerebral o una infección.
• Infecciones maternas: ciertas infecciones durante el embarazo, como la toxoplasmosis o la rubéola, pueden aumentar el riesgo de daño cerebral en el feto.
• Antecedentes familiares: en algunos casos, los bebés pueden tener antecedentes familiares de trastornos neurológicos o genéticos, lo que puede justificar la realización de una ecografía cerebral.
• Hidrocefalia: La ecografía cerebral puede detectar la acumulación de líquido cefalorraquídeo en el cerebro, lo que podría indicar una obstrucción o mal funcionamiento del sistema de drenaje, permitiendo evaluar igualmente su magnitud.
• Sospecha de malformaciones cerebrales: Si existen factores de riesgo o antecedentes familiares de malformaciones cerebrales, la ecografía cerebral puede realizarse para evaluar la estructura del cerebro del recién nacido y detectar posibles anomalías.
• Anomalías en la cabeza o el cráneo: Si el recién nacido presenta una cabeza anormalmente grande o pequeña, o si hay deformidades en el cráneo, la ecografía cerebral puede utilizarse para investigar posibles problemas cerebrales subyacentes.
• Síndromes genéticos o metabólicos: En el caso de bebés con síndromes genéticos o metabólicos conocidos, como el síndrome de Down, la ecografía cerebral puede ser útil para evaluar y monitorear el desarrollo cerebral y detectar posibles complicaciones.